¿Qué es mejor? ¿Usar lentes de contacto o lentes con monturas? Ambas son opciones que tu médico puede prescribir en una consulta oftalmológica y son buenas alternativas para corregir tus problemas para ver de lejos o cerca. Sin embargo ¿qué es preferible según tu caso?
¿Lentes de contacto o con monturas?
Cuando acudas a una cita en una clínica oftalmológica y te prescriban lentes medicados tendrás ambas opciones; pero qué son y qué diferencia cada una.
- Lentes con monturas. Conocidos como lentes, anteojos o gafas. Se trata de lentes con monturas y cristales que tienen una graduación ha sido determinada por un oftalmólogo u optometrista tras una medición. El objetivo de usarlos es corregir deficiencias visuales detectadas en la evaluación,
- Lentes de contacto. También son lentes que tienen el mismo propósito que los anteriores, pero a diferencia de los de montura se colocan directamente sobre la córnea.
Ventajas y desventajas de los lentes con montura
Ahora que sabes qué es cada tipo de solución para corregir los problemas visuales ¿por qué elegir lentes con montura? Aquí algunos motivos:
- Son fáciles de usar: basta con ponértelos y quitártelos sin mayor complicación.
- Se limpian y mantienen con sencillez.
- Reducen el riesgo de infecciones oculares, ya que no entran en contacto directo con los ojos.
- Su costo suele ser más accesible que el de los lentes de contacto, y no requieren gasto constante en soluciones de limpieza.
- Pueden convertirse en un accesorio de moda que refleje tu estilo personal.
Aunque parece que todo es positivo, hay algunas desventajas:
- Pueden obstruir la visión periférica, es decir, la que tienes hacia los lados.
- No siempre son la mejor opción de lentes para deportistas, sobre todo si hay riesgo de golpes o mucho movimiento.
- Se empañan en ciertos momentos, como al usar mascarilla, al cocinar o al pasar de un ambiente frío a uno cálido.
- Algunas personas sienten que cambian su apariencia y no siempre se adaptan a esa idea.
Desventajas y ventajas de lentes de contacto
Los lentes de contacto ofrecen una experiencia distinta: se colocan directamente en el ojo y reemplazan el uso de la montura.
Ventajas:
- Proporcionan un campo visual más amplio y natural, ya que siguen la curvatura del ojo.
- Son ideales para practicar deportes: no se caen, no se rompen y no interfieren con la movilidad.
- Te permiten elegir entre lentes transparentes o de colores, lo que puede añadir un cambio estético divertido.
- No alteran tu aspecto físico al no llevar montura visible.
Desventajas:
- Debes tocarlos y colocarlos en el ojo, algo que puede resultar incómodo o complicado al principio.
- No son recomendables si tienes omatofobia (miedo a tocarte los ojos).
- Requieren cuidados estrictos: limpieza diaria, soluciones específicas y reemplazo periódico según el tipo de lente.
- Mal uso o descuido puede aumentar el riesgo de infecciones oculares y problemas como el ojo seco.
- A la larga, resultan más costosos por el mantenimiento y la necesidad de comprarlos con frecuencia.
¿Lentes de contacto, con montura o ambos?
En este punto, ya has anotado las ventajas y desventajas de cada alternativa. Sin embargo ¿cómo saber cuál es la mejor opción para ti?
El siguiente test puede ayudarte, responde sí o no en cada caso:
Lentes con montura
- Prefiero algo práctico y sin rutinas de limpieza complicadas.
- No me gusta tocarme los ojos.
- Busco una opción más económica a largo plazo.
- No me incomoda que los lentes sean parte de mi apariencia.
Lentes de contacto
- Practico deportes o me muevo mucho durante el día.
- Quiero un campo visual completo, sin limitaciones laterales.
- Estoy dispuesto(a) a cuidarlos y mantenerlos todos los días.
- Me atrae la idea de no llevar montura o incluso de probar lentes de colores.
Resultados:
- Más “sí” en montura: los anteojos son tu opción ideal: prácticos, seguros y fáciles de mantener.
- Más “sí” en contacto: los lentes de contacto encajan mejor con tu ritmo: ofrecen libertad y un aspecto natural.
¿Por qué ambos?
Y si empataste en el test ¿qué puedes hacer? ¡Comprar ambos! Aquí una lista de motivos para tomar esta decisión:
- Te da más flexibilidad. Así puedes usar cada tipo de lentes según la ocasión. Por ejemplo, para tus actividades deportivas u ocasiones especiales ¡los de contacto! Y para el día a día los lentes con monturas.
- Reduces el riesgo de fatiga visual. Al intercalar ambos tipos de lentes reduces los efectos secundarios o desventajas del uso constante de lentes de contacto: como el ojo seco.
- Siempre podrás ver bien si algo pasa con el otro par. ¿Te imaginas que tienes una reunión importante y tus lentes de contacto se dañan o pierden? ¡Los lentes con montura serán tu respaldo! Y al revés. Así que es una buena inversión contar con ambos.
- Te permite jugar con tu estilo. Puedes usar lentes de contacto para crear un look más natural o cambiar el color de tus ojos. Y unos lentes con montura para crear un look vintage, ecléctico, urbano ¡en fin! Hay tantas monturas que las opciones parecen ser infinitas.
¿Hay otras opciones además de los lentes de contacto y anteojos?
Sí. Para corregir los errores refractarios de la vista también existe la cirugía. Hoy en día hay distintos procedimientos, siendo uno de los más conocidos la cirugía LASIK y SMART SURFACE.
A diferencia de los lentes de contacto o anteojos, no todas las personas son candidatas a este tipo de intervención. Por eso, es fundamental que tu oftalmólogo realice una evaluación detallada para determinar si puedes operarte.
Algunas ventajas de la cirugía refractiva, como LASIK son:
- Aunque es más costosa al inicio que los lentes o los anteojos, puede resultar más rentable a largo plazo, ya que no es necesario reemplazarlos periódicamente.
- Después de la operación, no tendrás que invertir en mantenimiento ni en cuidados especiales como ocurre con los lentes de contacto.
- Brinda mayor libertad al no depender de dispositivos externos para ver con claridad.
¿Quieres saber qué opciones tienes para corregir tu problema refractivo? ¡Separa una cita con nuestros especialistas en salud ocular! Te esperamos.
