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La cirugía refractiva con lentes intraoculares fáquicos se ha convertido en una alternativa innovadora para corregir problemas de visión como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo. Este procedimiento es ideal para quienes no son candidatos para LASIK o PRK (técnicas de cirugía refractiva láser), ofreciendo una solución personalizada y reversible que ha ganado popularidad en los últimos años. Se diferencia de las técnicas tradicionales, como LASIK o PRK, al no modificar la córnea, lo que lo hace especialmente adecuado para personas con características oculares específicas.
La cirugía refractiva con lentes fáquicos implica la implantación de un lente intraocular entre el iris y el cristalino natural del ojo. Este lente funciona como un "lente de contacto interno", diseñado para corregir errores refractivos de forma permanente, aunque es completamente reversible si fuera necesario.
Entre las principales ventajas de este procedimiento se encuentran:
Estas características convierten a la cirugía refractiva con lentes fáquicos en una opción destacada frente a otras técnicas láser.
Este tipo de cirugía es recomendada para personas que:
El oftalmólogo especialista en cirugía refractiva evaluará factores como la salud ocular general, el grosor corneal y la presión intraocular antes de aprobar el procedimiento.
La cirugía refractiva con lentes fáquicos sigue estos pasos:
El procedimiento es rápido, generalmente dura entre 20 y 30 minutos por ojo, y la recuperación suele ser breve.
Al comparar esta técnica con otros métodos, destacan los siguientes beneficios:
Ahora que entendemos la cirugía, profundicemos en los lentes fáquicos, el componente clave de este tratamiento. ¡Vamos!
Los lentes fáquicos son dispositivos ópticos implantables fabricados con materiales biocompatibles que no interfieren con las estructuras naturales del ojo. Se colocan en el espacio entre el iris y el cristalino, integrándose de manera segura para corregir errores refractivos.
Su diseño permite que la luz se enfoque correctamente en la retina, ofreciendo una visión clara y nítida incluso en condiciones de poca luz.
Existen diversos tipos de lentes fáquicos diseñados para corregir distintos problemas refractivos, adaptándose a las necesidades específicas de cada paciente. Como ya hemos explicado, estos lentes son una alternativa para aquellos que no son candidatos para cirugía con láser o tienen problemas oculares que impiden el uso de otros métodos. Los principales tipos de lentes fáquicos incluyen:
(Implantable Collamer Lens, por sus siglas en inglés) Estas lentes están fabricadas con un material biocompatible conocido como Collamer, que es flexible y se integra de manera óptima con los tejidos oculares, lo que minimiza el riesgo de rechazo. Son especialmente eficaces en la corrección de miopía, hipermetropía y astigmatismo, y se recomiendan en pacientes con córneas delgadas o estructuras oculares irregulares, que podrían ser inapropiados para una cirugía láser convencional. El lente ICL se coloca en el ojo mediante una intervención mínimamente invasiva, situándose entre el iris y el cristalino, sin necesidad de alterar la córnea, lo que proporciona una solución permanente sin la eliminación de tejido corneal.
Estas lentes están confeccionadas con PMMA (polimetilmetacrilato), un material rígido pero biocompatible. Se fijan al iris utilizando pequeñas garras, lo que asegura una posición estable y una corrección visual eficaz. Son particularmente efectivas para la corrección de miopía y astigmatismo elevados, y destacan por su alta estabilidad y durabilidad a largo plazo. Aunque no requieren la extracción de tejido corneal, su uso se recomienda en casos donde los pacientes tienen una anatomía ocular adecuada para la fijación de estas lentes, garantizando una corrección precisa y segura.
Similares a las lentes Artisan, pero hechas de un material más flexible de silicona, lo que facilita la implantación a través de una incisión más pequeña y permite una recuperación más rápida. Estas lentes son una excelente opción para pacientes con córneas delgadas o aquellas personas que presentan condiciones que no permiten el uso de lentes rígidas, como el caso de personas con irregularidades en la forma de la córnea o problemas previos con cirugías oculares. La flexibilidad de las lentes Artiflex también puede ser beneficiosa en pacientes que requieren una solución más personalizada.
Cada tipo de lente fáquico presenta ventajas específicas y se selecciona en función de las características oculares y las necesidades visuales particulares del paciente. Es fundamental que un oftalmólogo especialista en cirugía refractiva evalúe a cada paciente, considerando aspectos como la salud ocular, la forma de la córnea, y el tipo y grado del defecto refractivo, para determinar cuál de estas opciones es la más adecuada. Además, cada tipo de lente tiene sus propias indicaciones, beneficios y riesgos, por lo que el seguimiento médico postoperatorio es crucial para asegurar los mejores resultados.
Los lentes fáquicos ofrecen múltiples ventajas frente a otros métodos de corrección visual:
La elección entre la cirugía refractiva con lentes fáquicos y otras técnicas de cirugía refractiva, como LASIK o PRK, depende de las características individuales de cada paciente. No existe una solución única para todos, por lo que es crucial una evaluación personalizada. A continuación, presentamos una comparativa para ayudarte a comprender las principales diferencias entre estos procedimientos:
Característica | Cirugía Refractiva con Lentes Fáquicos | LASIK/PRK |
---|---|---|
Alteración del tejido | No altera la córnea | Requiere modificar la córnea |
Reversibilidad | Sí, el lente puede retirarse si es necesario | No, el cambio realizado es permanente |
Adecuado para córneas finas | Sí, es adecuada para córneas delgadas | No se recomienda para córneas finas |
La cirugía refractiva con lentes fáquicos es un procedimiento que implica la inserción de un lente dentro del ojo sin modificar la córnea, lo que la convierte en una opción ideal para personas con córneas finas o aquellas que no son candidatas para la cirugía láser. Además, este tipo de cirugía es reversible: si es necesario, el lente puede retirarse o cambiarse sin dañar la estructura ocular.
Por su parte, LASIK y PRK implican la modificación permanente de la córnea para corregir problemas refractivos. Aunque ofrecen resultados rápidos y permanentes, estos procedimientos no pueden revertirse y no se recomiendan para pacientes con córneas finas o ciertas condiciones oculares.
La flexibilidad de la cirugía refractiva con lentes fáquicos la convierte en una excelente opción para aquellos con necesidades visuales específicas o casos más complejos, donde los métodos de cirugía láser no son apropiados. Si estás considerando una alternativa para corregir tu visión y dejar atrás los lentes, en nuestra Clínica Oftalmológica Futuro Visión te ofrecemos todas las opciones en cirugía refractiva. Agenda tu consulta con nuestros especialistas y comienza tu camino hacia una visión más clara y saludable. ¡Te esperamos!
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